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domingo, 3 de junio de 2018

Hacia una Nueva Venezuela

Gráfica de Es.m.wikippedia.org

       Los  valeranos en el Estadoo Trujillo, compartimos un hermoso taller “Reconstrucción del tejido social”. Fue aleccionador sentir que no todo está perdido, que la desesperanza tenemos que sacudirla bien lejos, que existen en nuestro país grandes reservas de valores humanos y espirituales que acompaña a miles de compatriotas.

       Un Dios les pague al Centro Gumilla por este ameno taller realizado en la Universidad Valle del Momboy, sede Ateneo de Valera, y donde participaron trabajadores comunitarios y varios estudiantes trujillanos.
  
Algunas reflexiones de este encuentro

*Tenemos que comenzar a observa nuestro país con otra mirada. Aquí hay dos grandes responsables  de la situación que vive Venezuela: Gobierno y Oposición. 

*Lo que hace rica a una Sociedad, son las diferencias, allí hay un verdadero bagaje de saberes. A los gobiernos autoritarios no le gustan las diferencias, le encanta que  todos pensemos igual.

*¿Dónde estaba la oposición de este país antes de la llegada de Chávez?

*Cuando se vaya este gobierno, porque algún día tiene que hacerlo, la reconstrucción no va a ser fácil, de ahí que no hay que crear falsas expectativas entre los venezolanos.

*Tenemos que recobrar la confianza.La clase política le ha hecho un inmenso daño a este país, en su mayoría solo piensan en el interés personal.

*Hemos llegado a Una Venezuela de: “sálvese quien pueda”. Cada quien está resolviendo por su lado. La crisis nos arropo a todos. ¿Por qué si tus problemas son iguales a los míos, estamos divididos, confrontados?

*“El sálvese quien pueda”, es igual a: no me importa el otro”. Gobierno y oposición metieron a este país en un problema sin aparente salida “por ahora”.

*Las colas mantienen a la gente pensando en cómo soluciono la “la papa” olvidando la grave crisis social por la que atravesamos. Esto ha beneficiado al gobierno.

*El bachaquerismo, el rebusque, es el pan de cada día.

*Sin darnos cuenta, dejamos  grandes responsabilidades que eran de la sociedad civil en manos del estado, hoy ellos deciden; lo que podemos comer o no.

*Hemos llegado a un extremo de gravedad: los muertos a causa de la  violencia por la inseguridad,  son superiores a los países que están en guerra.

*Estamos muy centrados en el “problema”, en el drama, y olvidamos lo más importante: ¿Qué hacer para que las cosas cambien?

*Volvimos al “pan y circo de los romanos”. Pan para controlar y circo para distraer, el pero, es que el “pan se está agotando”.

*La Cuarta República hiso a los pobres “invisibles”, Chávez los sacó del olvido; aunque “el remedio fue peor que la enfermedad”.

*En tiempos de crisis, en la Cuarta  república, para los más pobres, la alternativa era: caraotas, yuca, plátanos y sardina, ahora, esto es un privilegio.

*Desaprender es sacudirnos toda actitud negativa para transformarla en actitud positiva  hacia la nueva Venezuela que queremos. Debemos responder con gran inteligencia ante el desastre que se vive.

*Salir de la Venezuela que tenemos con otra mirada, mayor comprensión, sumar todas las voluntades que se ganen para la reconstrucción de este país.

*El Centro Gumilla puede servirnos de inmensa ayuda para continuar este proceso de reencuentro social de los trujillanos. Continuar con los programas de capacitación y formación comunitaria por una “Venezuela mejor”.

Fuente: DiarioElTiempo/2017/AlfredoMatheus

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