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Corrado Cammisuli es un joven valerano que a fuerza de estudio, perseverancia y trabajo, se ha ido abriendo camino en el difícil arte de la música. Es hijo del conocido músico Giusseppe Cammisuli, quien lleva 40 años integrando la Banda Simón Bolívar. Corrado heredo de su padre la pasión por una de las artes de mayor antigüedad.
-Mi padre puso en mis manos un hermoso cuatro cuando tenía 4 años de edad, me dijo que era el primer instrumento que debía aprender a tocar, que era lo más representativo en el acervo musical venezolano. A temprana edad entra a la escuela de música Laudelino Mejía, cuando esta funcionaba en el Ateneo de Valera. De su mente jamás se borraría quienes fueron pilares fundamentales en su formación artística: Sonia Bastidas (muerta en trágico accidente de tránsito), Leonel Méndez, Maritza Rivas y Gregory Carreño.
Años después, continua su proceso de formación en la Orquesta Juvenil de Venezuela, luego se incorpora a la banda Simón Bolívar: "Mi paso por la banda Bolívar, fue una experiencia reconfortante".
Corrado Cammisuli motorizo la creación del primer grupo de jazz en la ciudad de Valera, formo la primera orquesta juvenil bailable (la recordada Salsa Joven) de mucha resonancia en el Occidente del país.
En 1986 se marcha a Caracas, buscando nuevas experiencias. En la capital en la República es llamado a formar parte en diversas orquestas, destacándose en el grupo Klase con la que recorrió todo el país. Por la extraordinaria ejecución que hace del saxofón este joven valerano ha participado en conciertos musicales en distintos países: Italia, España, Puerto Rico y donde próximamente lanzará al mercado lo mejor de la salsa latina.
Para orgullo de los trujillanos, participó junto a otros profesionales de la música en la conformación del primer grupo de jazz del estado Miranda, igualmente sobresaliendo como arreglista de distintas orquesta venezolanas.
Para Corrado Cammisuli, la música es uno de los artes más difíciles de entender, a veces es una actividad de mucho sacrificio, en oportunidades poco remuneradas, pero de mucha disciplina, hay que pasar hasta 10 horas de ensayo diario para lograr un buen trabajo.
-El arte musical, es una de las expresiones del hombre de mayor antigüedad. Si pensamos en unos instantes como necesidad para relacionarnos con la naturaleza, como deseamos entrar en contacto con otros humanos, así como queremos afecto, también el hombre necesita del género musical.
Explica Corrado Cammisuli que la música nos despoja de nuestro yo mezquino y egoísta, nos habla del hombre en paz consigo mismo y con Dios como dice el destacado artista Yehudi: "La música es un espejo del proceso mismo del pensamiento. En pueblos de Sudáfrica la música une a los pueblos y a la familia. Sus músicos le cantan al agua, a los alimentos y a la tierra".
Finalmente este joven nacido en la ciudad de Valera y de grandes éxitos en el campo musical dijo: “Quien quiera llegar lejos con el arte musical debe dedicarse al estudio, a la formación con férrea disciplina”.
Ser muy humilde, si el éxito se hace presente. Aceptar que siempre habrá otros mejores. Guardar un respecto supremo por el público, por el ser humano. Mi deseo es regresar algún día a Valera y brindar consejo a niños y jóvenes que incursionen en el género musical.
Fuente: DiarioElTiempo/1994/AlfredoMatheus
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