lunes, 1 de octubre de 2018

Podemos vivir sin huevos, sin música jamás

Gráfica de es-la.facebook.com

       ¡Valera contada y cantada por los músicos! Los artistas trujillanos para celebrar el día de su patrona; Santa Cecilia, echaron su cuento, relacionado a vivencia, anécdotas y sucesos destacados que han compartido a lo largo de sus vidas, evento realizado el pasado jueves 19 de noviembre, en la Universidad Valle del Momboy, al lado del ateneo de Valera, con los auspicios de la Escuela de Liderazgo y Dirección de Extensión de la UVM, la Fraternidad de Artistas y Músicos Trujillanos.
  
Historia que huele a calle
       La historia de la ciudad se constituye todos los días y en cualquier lugar donde un ser humano está presente. Tenemos que empezar a revalorizar “la otra historia”; la de la gente sencilla, la historia que huele a calle, a barrio, a comunidad, a serenata a la luz de la luna, a ricas remembranzas musicales, la de personajes anónimos que han dado su contribución en la construcción de la cultura regional, la de abnegados hacedores de la vida que han edificado nuestro acervo musical local. 

No podemos vivir sin música
       El día de Santa Cecilia, es el día mundial de los músicos, que hermosa labor la que realizan, pero poco valorada. El compositor como el que canta son artistas que nacieron para alegrar el alma humana. Ser músico es un verdadero privilegio, es toda una dicha, sencillamente porque le ponen ritmo y sabor a la vida.

       Un verdadero don de Dios que estos hombres y mujeres logren que todo suene armoniosamente, llevando alegría a los pueblos. Que grandes son ustedes; músicos y artistas de esta hermosa tierra trujillana, un maravilloso talento al servicio del gozo humano. La finalidad de un músico, aparte de ejecutar magistralmente un instrumento, es tocar el corazón de quienes lo escuchan.

Mensajero de Dios
       Me atrevería a decir que son sencillos mensajeros de Dios para alegrar el alma humana. “A pasar de  los pesares” la vida es bella y la música es mágica, y los músicos grandes magos de la esperanza. La música es el más grande alimento para el espíritu, y es tan poderosa, que hace vibrar el silencio.

       “El que escucha música, se da cuenta que su soledad se llena de algarabía, de bullicio y  deja de ser soledad”. Sabiamente lo manifiesta el laureado artista Carlos Santena. “en esta vida, pienso seguir rezando y tocando hasta la muerte”. 

Valera musical
       Próxima a cumplir 200 años la cuidad de Valera, se busca crear espacios para el reencuentro con la comarca que tanto nos ha dado y poco le hemos retribuido. El 19 de noviembre, al calor del cafecito trujillano y degustando la sabrosa acema carachera, tuvimos oportunidad de “Vivir y compartir” maravillosas remembranzas de la “Valera de siempre” en voces de sus protagonistas (músicos y artistas) que han sido testigos directos de una ciudad que se niega a olvidar un rico pasado de grandes valores espirituales.

Ahí queda eso
       “Los Venezolanos podemos vivir sin leche, sin huevos, sin degustar las caraotas negras, sin ropa de moda, sin generales que nunca han ganado una batalla. Se puede vivir sin suegra, sin políticos, pero sin música jamás de los jamases”. Si la música no existiera la pregunta obligatoria es ¿Cómo se imagina usted que sería la vida?

Fuente: DiarioElTiempo/2015/AlfredoMatheus

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Regresa por más

Anuncios Google